Algeciras, Playa El Rinconcillo

El Rinconcillo es la más extensa de las playas de Algeciras, con unos cuatro kilómetros de longitud. Está dotada de buenos equipamientos y servicios haciéndola apta para toda la familia.

Es típico dar un paseo hacia las dunas dirección Palmones. Merece la pena echar un vistazo a El Paraje Natural las Marismas del Río Palmones. Zona húmeda compuesta por marismas, dunas, matorrales y juncales, con un gran valor ecológico. Es zona de paso para las numerosas aves migratorias que todos los años cruzan el Estrecho de Gibraltar. Entre otras abundan la lechuza campestre, águila pescadora, tarro blanco, chorlitejos y garcilla cangrejera.

Si nos atrevemos y, tomando las debidas precauciones, podemos darnos un chapuzón, cruzar a la otra orilla del Río Palmones y continuar el paseo por la playa homónima, perteneciente ya a Los Barrios. Al final de la misma un muro de escollera (sic) nos impide continuar por el litoral, más adelante, hasta la playa de Guadarranque. Este muro, no obstante, permite ver el espigón donde Acerinox suele depositar residuos sólidos altamente sospechosos y completamente a la vista (!)

No puedo dejar de mencionar al tan manido chapatote, que nos "visita" regularmente, sobre todo los días en que el viento de levante es más patente. Manifiesto fracaso de la gestión medioambiental que reina en nuestras costas, agravado más aún si cabe, por las malas relaciones políticas entre el gobierno de España y el de la colonia de Gibraltar. Una pena.


Acuden a mi mente innumerables recuerdos de la playa donde pasé los veranos más ajetreados de mi infancia y adolescencia. Recuerdo que vivíamos en un pequeño apartamento en una urbanización privada con piscina y pista de tenis (en verdad de palas). Eso sí, con unas vistas inmejorables de la bahía y con Gibraltar como telón de fondo.


Tentado estoy de pillarme un hidropedal y "darme un rule" este veranito, así recuerdo viejos tiempos. De momento, me conformo con unos espetos.

Espetos

Playa El Rinconcilo, Algeciras, agosto 2009.
Los espetos de sardinas, al vivo fuego sobre una barca pesquera varada, son una de las tradiciones estivales que mejor sobrellevo ;D.