¡¡Tal y como se prometía, la unión hace la fuerza y Ronda ya ha caído!! Durante unos aproximadamente setenta y cinco kilómetros, un auténtico frenesí de curvas nos depara una de las jornadas moteras más placenteras que jamás se haya podido soñar. Nótese mi poca experiencia motera, unos tres meses más o menos.
Castellar, Jimena, Gaucín, son sólo algunos de los pueblos que dejamos atrás, en un día tal como el 09 de junio de 2007, en que todos los elementos se aliaron para regalarnos un espléndido periplo por las dos provincias, Cádiz y Málaga, que ahora sí, se encuentran bajo el yugo de nuestros caballos (aunque estos sean de vapor jeje). Podemos parar en cualquiera de los numerosos miradores que aguardan en los laterales del camino para relajarnos y, de camino, contemplar el paisaje.
Resaltar el estupendo estado de la carretera, que tras una fuerte remodelación, permite un uso y disfrute óptimos de la conducción. Eso sí, curvas y más curvas son las protagonistas de esta ruta. Esta segunda opción, que recorre parcialmente la conocida popularmente como Ruta del Toro, queda pendiente. ¡Espero que no por mucho! Será la A-381 la encargada de mostrarnos el camino.
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